Empezó dominando el partido, jugando con criterio pero con el correr de los minutos se fue quedando, Lanús de a poco fue equiparando el partido, así termino el primer tiempo, en el segundo tiempo el partido fue parejo y ambos se conformaban con el empate, dice el dicho que cuando no se puede ganar no está mal empatar, pero Independiente jugaba mucho para atrás ya promediando el segundo tiempo y sin pierna le cedieron la iniciativa al granate, pero este tampoco creó muchas situaciones y se dedico a jugar de contra. Sobre el final en una jugada de Regueiro tiro el centro y Mariano Pavone empujo a la red, fue a los 47 del segundo tiempo. El rojo se quedo con las manos vacías. Pensemos sí jugamos así en Brasil que nos puede pasar con el Inter.
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